Determinados anclajes requieren para su instalación la aplicación de un par de instalación. Este par permite que uno de los elementos del anclaje (normalmente una grapa o una camisa) se expanda dentro el agujero del material base donde está instalado, ejerciendo una presión sobre las paredes internas, facilitando la fijación mediante fricción. En este enlace se puede observar cómo se produce dicha expansión en un anclaje tipo MT.
La aplicación de este par debe ser realizada de forma controlada mediante una llave dinamométrica calibrada, dentro de los valores requeridos por la documentación técnica del producto.
Aquellos casos donde el par de instalación sea aplicado sin una llave de par controlado (por ejemplo, mediante una llave fija), pueden dar lugar a que la fuerza de expansión sobre el material base sea inferior o superior al previsto por el fabricante, siendo ambos casos situaciones no deseadas.
Los efectos de este par incorrecto aplicado sobre el anclaje pueden ser los siguientes:
- Un par inferior al recomendado puede originar que la fuerza sobre las caras internas del agujero sea baja, originando una fricción insuficiente para transmitir la carga, pudiendo producir un deslizamiento prematuro del anclaje o que la pieza a fijar quede suelta.
- Por el contrario, un par excesivo, puede originar una sobre-expansión del anclaje pudiendo presentarse varias situaciones:
- Rotura del anclaje. Al aplicar un par excesivo de instalación se puede superar el límite elástico del acero del eje del anclaje, pudiendo provocar la rotura del mismo. Este efecto es especialmente sensible en anclajes de medidas pequeñas, por ejemplo M6 y M8, ya que presentan secciones pequeñas de acero y los pares requeridos de instalación son relativamente bajos.
- Fisuración del material base. Una expansión excesiva del anclaje puede dar lugar a una gran fuerza de compresión en el material base, que podría provocar el desconchamiento o la fisuración del mismo.
- Gripado de las partes móviles del anclaje. Una presión excesiva del elemento de expansión (grapa o camisa) sobre el eje puede ocasionar una soldadura en frio o gripado entre ambos elementos, de forma que queden unidos solidariamente. Este efecto será especialmente relevante en los anclajes que trabajen en hormigón fisurado: cuando se presente una fisuración que separe las caras del agujero donde se encuentre instalado el anclaje, el elemento de expansión debe dar lugar a una post-expansión adicional que permita acomodarse de nuevo a las caras internas del taladro. Al producirse la soldadura en frío de la grapa con el eje, aquélla no podrá post-expansionarse, lo que originará que el anclaje deslice y falle a una carga inferior a la prevista.
- Rotura del anclaje. Al aplicar un par excesivo de instalación se puede superar el límite elástico del acero del eje del anclaje, pudiendo provocar la rotura del mismo. Este efecto es especialmente sensible en anclajes de medidas pequeñas, por ejemplo M6 y M8, ya que presentan secciones pequeñas de acero y los pares requeridos de instalación son relativamente bajos.
Última revisión: FAQ6 rev0